Año 1521. Nueve días antes de morir, el papa León X emite una bula que contiene un mandato solemne: «Roma no debe nunca, nunca, nunca quedarse a oscuras.» Año 2017. Una tormenta sin precedentes azota la ciudad de Roma. Un rayo cae en una de las centrales eléctricas y las autoridades se ven obligadas a imponer un apagón total de veinticuatro horas.